El técnico Gerardo Martino ha dado resultados hasta el momento y dentro de su forma de llevar al seleccionado cambiaron algunos códigos internos que espera se reflejen en mejores resultados y una mejor convivencia.
Desde su llegada, el estratega dejó en claro a los directivos de la Federación Mexicana de Futbol que quería estar cercano a los jugadores, pero algunas de las reglas cambiarían.
• Horarios para el uso de celulares, que en consecuencia es el uso de sus redes sociales, ya que no les permite que en las horas del desayuno, comida o cena bajen con ellos, con el fin de que la convivencia sea personal, y también para controlar que no caigan en polémicas o se dejen llevar por los elogios o críticas que se generan en las redes o medios de comunicación.
• Mantiene alejados a los elementos del staff del Tricolor, ya sea de la parte de logística, comunicación o utileros, con tal de mantener la privacidad del grupo y que no recurran a la filtración de lo que sucede internamente con el exterior.
• Límites para conformar sus convocatorias, ya que no le rogaría a ningún jugador para que se sumara al conjunto azteca por ninguna circunstancia. Se limitará a dar su lista, que se manden las cartas a los clubes extranjeros, y que sean los jugadores quienes digan si quieren participar o no con la Selección. (A diferencia de muchos técnicos que viajaban a Europa para presentarse, exponer su proyecto, y pedirles que se sumaran, para Martino esto no debe ser necesario).
• También estar más cercano a los jugadores de la Liga MX, y que fueran ellos quienes en algún momento abastecieran sus convocatorias, además de que quiere implementar mini concentraciones por lo menos una vez cada seis meses para conocerlos más.
• Por último, un tema que ha estado presente es ver al conjunto mexicano como negocio, y es algo que desde los altos mandos quieren erradicar, conscientes de que merecen premios monetarios, pero también que sea esto lo último en lo que se enfoque cada jugador.